ELENA G. DE WHITE, VIDA Y ESCRITOS

La Iglesia Adventista del 7 Día contó con el espíritu de profecía en la persona de Elena G. de White. Ella nació en Gorham, estado de Maine, E.E.U.U. el 26 de Noviembre de 1827.

En 1840 a la edad de 12 años entregó su corazón a Dios y fue bautizada por un ministro metodista. Con varios miembros de su familia, Elena asistió a unas reuniones adventistas en Portland y en 1842 aceptó plenamente las doctrinas, por lo cual en 1843, fue desfraternizada de la iglesia Metodista. Una mañana de diciembre de 1844, estando reunida con otras personas para orar, tuvo su primera visión, en la cual vio el viaje del pueblo adventista a la ciudad de Dios.

Relató la visión a los creyentes de Portland, quienes la aceptaron como luz de Dios. Luego realizó una serie de viajes para relatar esa y otras visiones, y a la vez lucha contra movimientos fanáticos que pugnaban por entrar en el grupo de creyentes.

En un viaje a Orrigton, Maine, conoció al joven predicador adventista Jaime White, con quien se casó a fines de agosto de 1846. Jaime y Elena estudiaron detenidamente un folleto del pastor José Bates titulado “EI Descanso del Séptimo Día”. Aceptaron la verdad del sábado, y el 7 de abril de 1847 se le mostró una visión en la cual veía la ley de Dios con una luz que resplandecía sobre el cuarto mandamiento.

 

ELENA G. DE WHITE, SUS VISIONES

Miles de personas tuvieron la oportunidad de ver a la Sra. White en visión. Se manifestaban en ella los mismos fenómenos descritos en la Biblia respecto a los profetas de la antigüedad. En una de sus visiones, tomó una pesada Biblia de casi nueve kilos y la mantuvo en alto durante media hora; cuando hombres fuertes quisieron hacer lo mismo, duraron sólo pocos minutos. En sus visiones era transportada a otros países, que luego reconocía en sus viajes.

Una de sus visiones más importantes fue acerca de “EI gran conflicto entre el bien y el mal”. Tuvo lugar en marzo de 1858, en Ohio. Otra visión fue acerca de la salud. Debido a esa visión, la iglesia comenzó a darle importancia a la temperancia y a la obra médica. En total tuvo cerca de dos mil sueños y visiones con revelaciones acerca de todos los aspectos de la verdad y la organización de la iglesia.

 

MISIONERA

Junto con su esposo viajó extensamente por los Estados Unidos, predicando, ayudando en la organización de la iglesia y luchando contra diversos problemas y errores. Desde el otoño de 1885 hasta el verano de 1887 estuvo en Europa. En 1891 viajó a Australia, donde ayudó a fortificar y establecer la obra.

 

ESCRITORA

Escribió miles de páginas y alrededor de 45 libros importantes. Entre los principales están, El Camino a Cristo, El Conflicto de Los Siglos, El Deseado de Todas Las Gentes, Patriarcas y Profetas, La Educación, El Ministerio de Curación y muchos otros.